Nada en particular

El tema de los sueños ridículos que tenemos en mi familia, me entretiene mucho. Cuando estoy cerca que un examen , como me he convertido en una histérica, sueño como estudiando. Recuerdo haber "analizado" los pensamientos de Rousseau, Maquiavelo , y cuanto personaje aparecía en la carpeta de historia, cuyo profesor solía hacer preguntas tales como "si Napoleón fuera árbitro de fútbol..." . Ahora sueño solfeando y ayer ,además ,con algún asunto del blog, que me ha quitado bastante tiempo de estudio, ya que mi fuerza de voluntad parece haberse reducido aún más. También soñé con Los Fabulosos, que después de tanto tiempo vienen para acá, solo que en el sueño tocaban en una especie de boliche, me colaba por un portón y llegaba bien adelante . El lugar era como un living con sillones rojos. Consigo ocupar uno de los sillones y cuando salen los músicos , uno de ellos toma un control remoto y empieza a manejar mi sillón como a un autito de juguete, lo que es muy divertido.
Después soñé otra vez con el bendito secundario, pero esta vez en particular con una función del elenco de teatro en mi querido escenario del salón de actos. Con Mamuchi no habíamos estudiado la obra y salimos las dos a hacer una improvisación que resulta un absoluto fracaso (me acuerdo de la incomodidad de estar en escena y no saber que decir). Ante tamaño desastre actoral, regresamos frente al público a explicar con cualquier escusa lo sucedido y mientras hablo se me empieza a hinchar el lado derecho del labio superior. Un flaco de los oían mis escusas me ofrece un caramelo de menta para la hinchazón, le pregunto "¿Qué?" "¿tan grande está?" ... "yyyyyyyyyyy... sí".

1. ¿Porqué no puedo usar sangría?, ¡¿QUÉ LE PASA A ESTE MUNDO?!
2. Si algún nombre propio está mal escrito, en este momento no me calienta.
3. Hoy voy a "justificar" esta porquería, pero no siempre me gusta como queda.